Experto de Salfa aconseja verificar la presión, temperatura y alineación de los neumáticos antes de emprender viajes extensos.
En la temporada de verano, muchas familias recorren nuestro país en automóvil, desplazándose de una ciudad a otra. Al realizar viajes de larga distancia, es crucial prestar atención al cuidado de los neumáticos para evitar inconvenientes y garantizar la seguridad en la carretera. Para ello, Salfa a través de su unidad de neumáticos entrega varios puntos a considerar para evitar imprevistos y poder disfrutar sin incidentes está esperada época del año.
Un punto vital para chequear en los neumáticos al emprender un viaje es asegurarse de que los mismos tengan una profundidad de surco adecuada para evitar aquaplaning o derrapes no deseados en caminos de tierra. Para que los neumáticos cumplan correctamente sus funciones de frenado, agarre y direccionalidad, se recomienda que los surcos o dibujos de las bandas de rodamiento tengan una profundidad mínima de 3 mm. Recuerda que legalmente la profundidad mínima permitida es de 1,6 mm.
También es importante realizar rotación, dado que los ejes delanteros y traseros experimentan desgaste de manera diferente. Se recomienda evaluar la posibilidad de rotación antes de cada viaje en un servicio técnico autorizado. En cuanto a la presión de los neumáticos, se sugiere mantenerla siempre en el nivel indicado por el fabricante, ya que una presión inferior puede causar deformaciones y calentamiento del neumático.
Según Gonzalo Carmona, Subgerente de operaciones de la unidad de neumáticos de Salfa, en el caso de los automóviles la presión de los neumáticos está usualmente entre 29 hasta 45 libras. “El número exacto de presión está casi siempre indicado en el marco de la puerta del piloto. Es el fabricante del vehículo quien indica el valor exacto de presión debido al peso específico del auto sobre los neumáticos”.
Una interrogante frecuente que surge entre los usuarios está enfocada en la fecha de expiración de los neumáticos, frente a dicha pregunta Gonzalo Carmona señala que, “estos no tienen una determinada de caducidad, pero sí es importante verificar el estado en el que están. Algunos fabricantes recomiendan realizar cambio a partir de los 5 años de uso, a ese tiempo se recomienda pasar por una revisión en un centro especializado.
Tras lo anterior, Gonzalo Carmona menciona “es vital hacer el cambio en el momento correcto, ya que un neumático con desgaste avanzado puede producir un accidente al pasar por agua o intentar un frenado brusco, el daño en los neumáticos causa la pérdida de agarre. Por otra parte, el cambio no oportuno también puede ocasionar aumento del riesgo de reventones, problemas de dirección y mayor consumo de combustible, por lo tanto, es clave fijarse en los neumáticos para evitar malos ratos o posibles accidentes”.
Desde Salfa, al hablar de mantención de neumáticos se aconseja realizar los servicios de balanceo y alineación en la red de servicios de la marca, los cuales están disponibles a un precio competitivo con profesionales calificados que garanticen la calidad de los trabajos realizados, brindándote así toda la seguridad para emprender tu próximo viaje.
