Informe de Kaspersky destaca las tendencias digitales infantiles y la importancia de acompañar a los niños en sus tiempos libres frente a pantallas.
Durante los tiempos libres, los más jóvenes tienden a pasar más tiempo conectados a internet, descubriendo nuevas tendencias.
Según el más reciente informe de Kaspersky sobre los intereses digitales de los menores, niños y adolescentes están más inmersos en el entorno digital: ha aumentado significativamente su interés por los chatbots con inteligencia artificial (IA).
Mientras que la viralización de memes tipo “brainrot” y los juegos en línea son parte de su cultura digital.
YouTube se mantiene como la app más popular y WhatsApp está en la segunda posición, superando a TikTok.
En este mundo hiperconectado, los niños interactúan con la tecnología más que nunca. En promedio, el 39% de los menores en Chile pasan entre 3 y 8 horas diarias frente a una pantalla, cifra que puede incrementarse durante recesos escolar o fines de semana.
Con una parte importante de su vida desarrollándose online, es importante comprender qué buscan, qué plataformas usan y qué tendencias influyen en su comportamiento e intereses.
Por ejemplo, el informe identificó que los niños sienten curiosidad por la IA y están incorporándola activamente en su vida digital.
Entre mayo de 2024 y abril de 2025, más del 7.5% de sus búsquedas estuvieron relacionadas con chatbots como ChatGPT, Gemini y, especialmente, Character.AI, una plataforma que permite interactuar con bots que imitan personajes reales o ficticios.
Esta cifra representa un crecimiento notable frente al año anterior, cuando solo el 3.19% de las búsquedas estaban relacionadas con este tipo de tecnología.
Sin embargo, no todas las interacciones con chatbots son seguras.
Algunos bots pueden exponer a los menores a contenido emocionalmente intenso, desinformación o temas no apropiados para su edad, sobre todo si han sido creados o personalizados por otros usuarios.
Como estas plataformas suelen basarse en contenido generado por la comunidad y pueden carecer de una moderación estricta, es fundamental hablar abiertamente con los niños sobre cómo utilizar estas herramientas.
Aunque los memes no dominaron las búsquedas este año, revelan otra parte de la cultura digital infantil.
Los más populares están en la categoría conocida como “brainrot”, un tipo de humor absurdo y deliberadamente caótico que se difunde a través de videos cortos.
Entre los más buscados estuvieron la frase italiana “tralalero tralala” y una pista de audio conocida como “tung tung tung sahur”. Puede que no tengan sentido para los adultos, pero para muchos niños son bromas compartidas que se viralizan rápidamente entre plataformas.
Uno de los fenómenos emergentes que llamó la atención de los analistas fue Sprunki, un juego de navegador que combina música e interacción visual.
Los jugadores deben sincronizarse con el ritmo de un audio, lo que hace que la experiencia sea inmersiva y físicamente activa.
Su diseño colorido y animado, junto con una dinámica de juego atractiva, lo han vuelto muy popular entre las audiencias más jóvenes.
Esto se refleja en las búsquedas de Google y YouTube, donde Sprunki se colocó entre los cinco temas de gaming más buscados, junto con otros favoritos como Brawl Stars y Roblox.
Al mismo tiempo, algunos hábitos ya conocidos se mantienen. La actividad en línea más común entre los niños fue buscar plataformas de streaming: casi el 18% de las consultas estuvieron relacionadas con ver videos.
YouTube sigue siendo la app más utilizada en Android, creciendo de 28.13% a 29.77% en el último año. WhatsApp subió al segundo lugar con 14.72%, superando a TikTok (12.76%), mientras que Snapchat y Facebook están en declive.
Este cambio podría reflejar nuevos hábitos de comunicación, en los que los menores usan con mayor frecuencia las apps de mensajería para compartir enlaces, memes y videos con sus amigos.
Plataformas como Netflix, Twitch y Disney+ conservan su popularidad, aunque, como se ha advertido, suelen ser blanco frecuente de ciberdelincuentes.
Los videojuegos también destacan entre los temas más buscados: Roblox y Minecraft continúan liderando, junto con Poki, un portal que ofrece cientos de juegos gratuitos, simples, rápidos y accesibles directamente desde el navegador.
“Las tendencias muestran lo rápido que evoluciona la cultura digital infantil: un día están conversando con bots de IA y al siguiente, todos tararean una canción meme italiana que jamás habías escuchado. En sus tiempos libres o vacaciones, cuando los niños pasan aún más tiempo en línea, es la oportunidad ideal para que padres y madres de familia se tomen el tiempo de entender lo que sus hijos ven, juegan o buscan en Internet. Eso da lugar a conversaciones significativas y a la construcción de hábitos digitales más seguros y de confianza. Las apps de control parental pueden ser grandes aliadas en ese camino, no solo para proteger, sino para estar presentes en la vida digital de nuestros hijos”, comenta Fabiano Tricarico, director general de Productos para el Consumidor para Américas en Kaspersky.
Para que los menores disfruten de su tiempo libre frente a las pantallas de manera segura, Kaspersky recomienda a padres y madres de familia:
- Mantener una comunicación abierta con los niños sobre los riesgos en línea y establecer reglas claras para su seguridad.
- Estar informados sobre nuevas amenazas y monitorear activamente la actividad digital de sus hijos para crear un entorno más seguro.
- Proteger la experiencia de juego de los menores instalando una solución de seguridad confiable, para evitar descargas de archivos maliciosos.
- Enseñar a los niños conceptos básicos de seguridad digital mediante herramientas educativas como el Abecedario de Ciberseguridad de Kaspersky, que comparte buenos hábitos digitales y cómo evitar amenazas.
- Usar apps de control parental para proteger a los niños off y online, gestionar el tiempo que pasan en pantalla, bloquear contenido inapropiado y saber su ubicación para mayor tranquilidad.
Para más información sobre cómo proteger la vida digital de los menores, visita nuestro blog.