Estos resultados, obtenidos por doctores del Laboratorio de Biología y Conservación Espermática de Universidad de La Frontera, permiten avanzar en nuevos tratamientos para casos en que aún no ha sido posible detectar la causa de la infertilidad.
La infertilidad ha ido en aumento en el último tiempo. A la fecha, estudios indican que esta patología afecta a 48,5 millones de parejas en el mundo, lo que representaría alrededor del 8% a 12% de las parejas en edad reproductiva.
En ese contexto, cerca del 20% de los casos de infertilidad tienen una causa desconocida. Por ello, un equipo de investigadores de la Universidad de La Frontera decidió explorar este campo, para lo cual tras 6 años de trabajo lograron determinar un factor que impactaría en las oportunidades reproductivas de las parejas.
Se trata de un fenómeno clínicamente conocido como NETosis, un proceso que deteriora la calidad espermática si se presenta en los varones y también puede impactar de manera negativa la fertilidad en presencia de enfermedades de transmisión sexual en la mujer.
“Nos hemos enfocado en investigar la interacción de los neutrófilos con elementos patógenos en infecciones vaginales y el nuevo mecanismo descrito como “NETosis”, que consiste en la liberación de verdaderas “telas de araña” conocidas como redes extracelulares de neutrófilos (NETs) que al liberarse produce una captura y neutralización de los espermatozoides, generando disminución de su capacidad fecundante”, dice la académica de la Facultad de Medicina y codirectora del Laboratorio de Biología y Conservación Espermática de la Universidad de La Frontera, Fabiola Zambrano.
Los resultados de esta investigación liderada por la doctora Zambrano, publicada a finales de 2022 en la revista Cells, evidenciaron que mujeres con infecciones de transmisión sexual tienen una alta producción de NETs, comparadas con mujeres sanas. Este hallazgo toma relevancia ya que al estar presente una sobreexpresión de NETs en el tracto reproductivo de la mujer puede existir una interacción negativa con los espermatozoides, reduciendo la movilidad espermática, con un daño en la membrana plasmática y perjuicio en el acrosoma del gameto masculino, afectando así la posibilidad de una fecundación exitosa.
“Nuestra evidencia señala que mujeres con vaginitis asociada a infecciones por Candida albicans –un tipo de hongo- y Tricomonas vaginalis -infección de transmisión sexual común provocada por un parásito- generan altas concentraciones de NETs, mecanismo que hasta ahora no había sido considerado en el diagnóstico ni el tratamiento de estas infecciones”, destaca la doctora. “Esto abre un campo nuevo de estrategias terapéuticas que pudieran desarrollarse para mejorar las probabilidades de éxito en el proceso reproductivo, por medio del bloqueo del proceso de NETosis tanto en el tracto reproductivo femenino como en el aparato urogenital en el varón, un ámbito desconocido donde sin lugar a duda focalizaremos nuestro trabajo futuro”, añade.
Impacto del avance
El principal impacto de este avance es que permitiría establecer una causa de infertilidad que hasta ahora no había sido considerada a nivel mundial.
“Este aporte ayudará a mejorar el diagnóstico y posible tratamiento de esta patología en la población. Nuestros resultados serán de gran relevancia para entender procesos reproductivos que cursen con la presencia de leucocitos, así como aportar al desarrollo de tratamientos alternativos para bloquear la producción de NETs en situaciones donde su capacidad de inducir daño supere el beneficio aportado por su acción antimicrobiana”, agrega la doctora Zambrano.
Con ello, el equipo de investigadores, conformado por la Dra. Fabiola Zambrano, Dra. Mabel Schulz, Dra. Pamela Uribe y Dr. Raúl Sánchez, se encuentran trabajando, paralelamente, en diferentes proyectos para conocer más sobre las causas desconocidas que subyacen a la infertilidad con miras a una aplicación clínica.