*Por Nicolás Williams, presidente de la Asociación Gremial de Corredores de Seguros de Chile (ACOSEG).
En noviembre nuestra industria celebra el Mes del Seguro, una fecha en la que siempre es bueno recordar los avances sostenidos y también, una oportunidad para desafiarnos respecto a cómo debe ser el mundo de los seguros, para dar soporte a las necesidades que se avecinan en un futuro cercano para los ciudadanos y ciudadanas de nuestro país.
La Globalización que se ha impulsado desde hace décadas, ha generado espacios comunes a muchas inquietudes alrededor del mundo, el Calentamiento Global, la Inteligencia Artificial y la Transformación Tecnológica son algunas de ellas; pero en cada rincón de este planeta sigue existiendo un componente local que es primordial. Atender esas necesidades desde ambas perspectivas, nos permitirá entender con mayor claridad cuáles serán los desafíos en los que tendremos que acompañar a las chilenas y chilenos en el futuro próximo.
Uno de los temas más álgidos del último tiempo ha sido la salud, la denominada Crisis de las ISAPRES, la incertidumbre respecto a cuántos beneficiarios es capaz de sostener el sistema público, acciones judiciales, proyectos de Ley y discusiones parlamentarias, han sido la tónica durante varios meses de este 2023. Lo que sí podemos señalar como algo empírico en todo este proceso, es que cientos de miles de usuarios, que hasta hace poco estaban en ISAPRES, han migrado a FONASA.
Esta migración masiva y la irresolución que ha acompañado este proceso han hecho que las personas busquen alternativas en los seguros de salud. Por un lado, debemos estar preparados -y así se ha visto con un incremento en la oferta y en la cantidad de personas que pueden optar a cobertura- para apoyar a las personas en este momento y por otro, insistir en nuestro rol social, a sabiendas que podemos ser un importante aporte a la esfera pública en la discusión del seguro complementario anunciado por FONASA, poniendo nuestras competencias a disposición y aportando con nuestro conocimiento del sistema.
Otra área que requiere nuestra atención es la automotriz, en el ámbito de la seguridad tenemos que ser más estrictos con los productos que sean un aporte para tener calles y carreteras más seguras, sin dejar de lado el llamado a las compañías automotrices a sumarse y hacerse parte de esa primera línea de seguridad para sus vehículos, con dispositivos de fábrica que dificulten su robo.
Pero en el área automotriz no sólo podemos quedarnos en eso, también tenemos que mirar al futuro, uno con enfoque más sostenible llamado electromovilidad, que necesitará afianzar el trabajo público – privado en la construcción de productos que nos permitan abordar los desafíos que esta tarea implica para la asegurabilidad. Un tema que desde ACOSEG ya comenzamos a trabajar en conjunto con la Asociación de Vehículos Eléctricos de Chile (AVEC) y la Agencia de Sostenibilidad Energética (Agencia SE), creando la primera mesa de seguros para la electromovilidad.
En un mundo que cambia cada vez más a prisa, son muchos otros los desafíos a los que se verá enfrentada nuestra industria; desde ACOSEG estamos convencidos que, si entendemos hoy los requerimientos del mañana, creando productos en forma mancomunada, que apoyen la sostenibilidad, la seguridad y que puedan llegar a más personas; tendremos las herramientas necesarias para enfrentar el futuro con optimismo.