Además del placer que provoca, se han demostrado sus efectos antioxidantes y protectores de la salud cardiovascular.
Tradicionalmente, se ha asociado el chocolate al invierno o los días más fríos, sin embargo, su consumo se ha extendido cada vez más a otras épocas del año, no sólo por su irresistible sabor, sino también por los beneficios que tiene para el organismo. En este sentido, los especialistas concuerdan en lo positivo que es incluirlo en nuestra alimentación diaria, siempre considerando que “el chocolate por definición es una mezcla de derivados del cacao, pasta de cacao y manteca de cacao principalmente, con azúcar o endulzante. Al leer los ingredientes éstos debiesen ser los principales, priorizando siempre aquellos con un alto porcentaje de cacao”, comenta la nutricionista Tamara Dides.
Respecto a sus atributos saludables, Dides detalla que “el cacao es rico en flavonoides, un tipo de micronutrientes con gran poder antioxidante. Así, se le han atribuido efectos cardioprotectores, que incluyen propiedades antioxidantes, disminución de la presión arterial, inhibición de la actividad plaquetaria y activación de la síntesis endotelial del óxido nítrico. Esto puede variar entre personas, dosis, tipo de producto, entre otros, pero a modo general un buen chocolate puede perfectamente ser parte de una dieta saludable y equilibrada”.
Además de los efectos ya comprobados, existen otras consecuencias favorables que están en estudio. “Por su alto contenido en antioxidantes se ha postulado que podría tener efectos beneficiosos sobre la salud de la piel, protegiendo sobre la acción de radicales libres y promoviendo un efecto anti inflamatorio, pero la evidencia aún no es concluyente. Algo similar ocurre con su impacto sobre el ánimo, pues no se sabe bien si es por el componente placentero asociado a comerlo o por reacciones físico-químicas que éste puede generar en nuestro organismo”, afirma Dides.
En definitiva, incluir chocolate en nuestra dieta estival es recomendable, prefiriendo aquellos con altos porcentajes de cacao e idealmente ingredientes orgánicos. Tal es el caso de Paccari, chocolate de origen ecuatoriano 100% orgánico, vegano, libre de azúcar refinada o grasas saturadas. Cuenta con más de 40 sabores y distintas variedades de snacks, ideales para acompañar y alegrar las tardes de verano. “No podemos olvidar el placer asociado a comer, por lo que un chocolate de buena calidad puede ser un gran aliado tanto para nuestra salud física como mental” concluye Dides.