Este servicio de monitoreo continuo, permite evaluar la salud de las plataformas en tiempo real en los distintos sectores de la industria. Hoy, un 47 % de las compañías TI están invirtiendo en soluciones de observabilidad, estimando que hacia el 2026 el 70% de las organizaciones que la apliquen correctamente, reducirán significativamente la demora en la toma de sus decisiones.
Expertos hablan de que el mundo vive la “era de la observabilidad”, concepto que va más allá de lo que entendemos por monitoreo y que permite dar seguimiento continuo a sistemas y aplicaciones para detectar a tiempo: fallas, anomalías y vulneraciones, incidiendo directamente en la experiencia de usuarios internos y externos de la organización.
Si bien hay sectores que han adoptado más tempranamente el uso de herramientas de observabilidad, como son los servicios financieros, hospitales, gobierno y empresas transaccionales; su incorporación ha venido siendo más transversal en los últimos años. Las empresas crecen de manera inorgánica y crean nuevas áreas, cada una con sus propios ambientes informáticos, por lo cual se va perdiendo el control sobre una visión panorámica de la salud digital de sus plataformas de negocio.
Marcelo Castillo, gerente de desarrollo de servicios gestionados de TLine Chile, señala que “la contratación de este tipo de servicio ha crecido en los últimos 3 años. El 47 % de las compañías están invirtiendo en soluciones de observabilidad, automatización TI, y un 44% menciona una mayor adopción de herramientas de observabilidad. A fines de 2022, pocos tenían conocimiento en Chile sobre observabilidad, pero actualmente es un servicio de alta demanda. Muchas organizaciones desean asegurar la continuidad y calidad de sus servicios, transfiriendo la tarea de monitorear 7×24 sus plataformas productivas a empresas especializadas, permitiendo a ellos dedicarse a hacer crecer su negocio”.
Las compañías buscan detectar -en tiempo real- la causa raíz de su incidencia; ya sea, identificar la falla o aislarla para dar solución en el menor tiempo posible. “Una empresa no monitoreada, podría tardar mucho tiempo en resolver un problema, afectando directamente la operatividad, la producción y la experiencia de usuarios internos y externos de la organización, cada vez más exigentes. A fin de cuentas, la calidad de un servicio pasa por la eficacia de la experiencia de cada usuario”, añade Castillo.
Un servicio de observalidad brinda respuesta a estas necesidades, informando de manera automática aquellos cambios de estado en las plataformas, baja de servicios, vulneración de plataforma, etc.; notificando alertas (por correo, WhatsApp, teléfono o mensaje de texto) a quien la empresa contratante identifique como resolutor. Evaluar el retorno de la inversión en observabilidad es crítico al momento de priorizar la adopción de tecnologías y el desarrollo de proyectos TI; no obstante, los expertos identifican una directa relación entre experiencia de usuario y observabilidad, razón por la cual se prevé un alza en estas soluciones.