Los juegos de azar en Chile generan decenas de miles de millones de dólares al año, y estas cantidades están creciendo rápidamente. Los expertos dicen que esta tendencia puede continuar al menos hasta 2026.
La actual ley de casinos de Chile ha estado vigente desde su publicación en 2005. Sin embargo, las autoridades del país entienden que en su formato actual este conjunto de reglas puede no ser tan efectivo como lo era en el momento de su desarrollo. Esto se debe a muchos factores:
- El mercado ha crecido significativamente. Hoy no sólo hablamos de operadores de juego chilenos, sino también de grandes marcas internacionales como 1xBet, Mostbet o Parimatch. La abundancia de empresas extranjeras obliga a considerar mejor las reglas de funcionamiento, la carga fiscal y otros factores importantes;
- El mercado del juego en línea se está desarrollando. Cada vez es menos probable que los chilenos visiten casinos físicos y más probable que jueguen en línea. Un simple registro en 1win o enlace al sitio para descargar la app de Mostbet permite jugar directamente desde casa desde ordenadores o dispositivos móviles. No es de extrañar que esta accesibilidad haga que este tipo de entretenimiento sea lo más popular posible;
- Variedad de juegos de azar. Con la transición al espacio en línea, los juegos de azar se han vuelto mucho más diversos. Ya no se trata sólo de tragaperras, ruletas o apuestas deportivas, sino también de diversos salones recreativos. No hay que olvidar las lootboxes, un método de monetización de los videojuegos convencionales. Este método es muy discutido, ya que tiene todas las características de los juegos de azar. Expertos chilenos han publicado incluso artículos de análisis dedicados a este problema.
También cabe señalar que las leyes tributarias actuales en Chile son bastante complejas. Por ejemplo, el Servicio de Impuestos Internos de Chile (SII) emitió recientemente una resolución interesante. De su texto queda claro que las normas fiscales que funcionan para los casinos en línea no se aplican a las casas de apuestas. Estos últimos están actualmente sujetos a las normas generales del IVA.
Está claro que la legislación fiscal y de otro tipo relacionada con los juegos de azar en Chile debe transformarse para adaptarse mejor a la situación actual del mercado. Y podemos decir con seguridad que ese trabajo se llevará a cabo. Después de todo, el mercado del juego ha alcanzado los 66 mil millones de dólares anuales y está creciendo un 10% anual. Obviamente, cantidades tan importantes pueden ser una excelente fuente para reponer el presupuesto del país, lo cual es especialmente importante en estos tiempos difíciles. Pero mientras tanto, los nuevos impuestos y otras leyes no deberían asustar a los inversionistas y operadores que ahora ven el mercado chileno como uno de los más prometedores de Sudamérica.