Por: Eduardo Hernández, Gerente Legal de ALTO Chile, empresa experta en protección de activos y reducción de delitos.
Santiago, 2024.- Actualmente el segundo borrador de Reglamento de la Ley de Seguridad Privada a cargo de la Subsecretaría de Prevención del Delito se encuentra en revisión por parte de la Contraloría General de la República. Este cuerpo normativo sumado a la Nueva Ley promete transformar el panorama de la seguridad privada en Chile, estableciendo nuevas exigencias y estándares que impactarán de manera directa a las empresas de diferentes sectores productivos. Su eventual promulgación marcará un antes y un después en diversas empresas del país, generando desafíos y oportunidades para las organizaciones en la búsqueda de adaptarse ante un nuevo escenario de cumplimiento normativo.
Entre otras cosas, esta nueva ley “actualiza los criterios y el procedimiento para designar entidades obligadas, las cuales deberán implementar medidas de seguridad específicas que deberán quedar recogidas en los Estudios de Seguridad que serán aprobados por la Subsecretaría de Prevención del Delito”. Además, “modernizará los procesos de certificación de guardias y vigilantes privados”.
El nuevo marco normativo, que estará conformado por la ley, su reglamento y una serie de resoluciones exentas que serán dictadas por la Subsecretaría de Prevención del Delito redefinirán los estándares tradicionales que existían en esta materia, y que no habían sufrido mayores modificaciones en décadas. Además, implicará nuevos desafíos para las empresas obligadas, en lo que respecta al diseño de estrategias en un entorno más exigente y dinámico al que se suma una nueva arista en el mundo del cumplimiento normativo empresarial.
Si bien la implementación y cumplimiento de las obligaciones de la nueva Ley serán prioritarias, se recomienda a las empresas a pensar a largo plazo a fin de definir y adoptar planes estratégicos con enfoque integral en aspectos de seguridad, y que ofrezcan continuidad operacional a sus negocios ante diferentes escenarios.Pensar en solo implementar medidas de seguridad disuasivas como cámaras de vigilancia o contratar personal de seguridad, puede algunas veces resultar insuficiente.
Desde ALTO recomendamos permanentemente implementar tanto medidas preventivas como persecutorias frente al delito, buscando aumentar el costo percibido por los delincuentes, y así evitar la sensación de impunidad, y maximizar la percepción de seguridad.
Contribuir en la generación de espacios más seguros resulta clave para el modelo de ALTO, en cualquiera de las industrias en las que opera, ya que esto contribuye directamente en colaboradores, clientes y en la comunidad toda. Por lo mismo, generar esta red de protección requiere un compromiso constante en el diseño de estrategias efectivas de seguridad que brinden tranquilidad y resguarden tanto el entorno laboral como la experiencia de compra de sus clientes.
Sobre ALTO
ALTO es una empresa de servicios multinacional dedicada a la protección de activos, marcas y personas a través de soluciones basadas en tecnología para generar comunidades prósperas y más seguras, disminuir riesgos y delitos. ALTO está presente en Chile, México, Colombia, España y Estados Unidos.
