He estado al lado de familias que despiden a sus hijos, de niños que hacen preguntas difíciles con una sabiduría que sobrecoge, de voluntarios que dan sin esperar nada a cambio. En todos esos momentos, he comprendido que el cuidado es una forma de amor profundo y transformador.
Por eso, quiero invitar a la sociedad a reconocer el valor real del rol que ejercemos. El cuidado no se limita a una técnica, sino que se extiende al alma del otro. Como enfermeras y enfermeros, no solo estamos para asistir, sino para estar. A veces, eso basta.
Hoy más que nunca, en un sistema de salud tensionado, necesitamos reivindicar el cuidado como un derecho y una vocación. Porque cuidar es amar, y el mundo necesita más de ese amor.
Jazmine Fernández Ganem
Enfermera
Fundación Nuestros Hijos
Se trata de Hechizero White, Rosé y Red Blend con sólo 14 calorías por copa.…
La magia de esta festividad se activa con la marca del corbatín a través de…
La marca se consolida entre los 15 SUV más vendidos del país, planea alcanzar cerca…
La iniciativa, desarrollada por Subaru, en alianza con la app SUDA y CONAF. Busca promover…
2026 llega con cambios radicales. IA generativa, automatización y regulación redefinen el futuro del mercado…
Summer Funpark, la fiesta de verano: inflables, pistolas de agua, toboganes y mucho más en…