Por Felipe Figueroa, CEO de Total Campers
La conexión con la naturaleza va más allá de solo estar presente y poder contemplar su esplendor. Es un encuentro con nuestras raíces, un retorno a lo que somos en esencia. Nos proporciona esa paz para reflexionar, para comprender nuestro lugar en este vasto mundo. La belleza natural nos sorprende, nos emociona y nos inunda de emociones positivas.
Sin embargo, una experiencia en la naturaleza puede verse perturbada por incomodidades si no estamos debidamente equipados.
El buen equipamiento es el fiel aliado que garantiza que esos momentos de paz, no se vean opacados por el frío, la humedad, el insomnio o una alimentación precaria. ¿Qué mejor forma de realzar esa experiencia que a través de un equipamiento que no solo nos protege de las inclemencias, sino que también nos permite entretenernos y disfrutar al máximo?
No se trata solo de poseer los implementos necesarios, sino de mantenerlos en óptimas condiciones: ordenados, limpios y listos para ser utilizados en cualquier momento. La naturaleza es impredecible, capaz de llevarnos de la comodidad al desafío en un abrir y cerrar de ojos. Estar preparados minimiza el impacto de estas condiciones cambiantes en nuestra experiencia general.
Por esto, un buen camper no solo facilita dormir, cocinar y estar cómodos al aire libre, sino que también ofrece un amplio espacio de almacenamiento, permitiendo tomar decisiones rápidas y escapar en cualquier momento. La facilidad de armar y desarmar el campamento agrega un valor incalculable: llegar al destino y estar instalado en poco tiempo, moviéndose con agilidad. Esta facilidad no solo optimiza el tiempo, sino que también fomenta que más miembros de la familia se sumen a la aventura.
Para los espíritus más aventureros, existen destinos emblemáticos, como la carretera austral, con sus 2 o 3 semanas de recorrido por paisajes impresionantes. La soledad y la belleza sin igual se encuentran en las playas de la zona de Copiapó y Antofagasta, donde lugares como Playa La Virgen, permiten acampar y explorar distintos rincones durante varios días.
La Región de Los Lagos, por su parte, ofrece una infraestructura excelente para acampar y recorrer lugares de gran interés, como los lagos Calafquén, Villarrica y Llanquihue. Es un viaje que rebosa vida y entretenimiento, una experiencia que promete diversión para todas las edades.
La calidad del equipamiento no solo mejora la experiencia de acampar, sino que también influye en la frecuencia y la disposición de la familia para unirse a esta aventura. Cuando la salida se facilita, el equipamiento es óptimo y la experiencia es grata, las oportunidades de salir a explorar la naturaleza se multiplican, enriqueciendo nuestras vidas con recuerdos invaluables y conexiones más fuertes con el entorno natural que nos rodea.
Para saber más, visita: https://www.totalcampers.cl/